El espárrago fue traído a nuestra tierra por los árabes, como gran parte de los productos alimenticios que consumimos. Dado su bajo aporte calórico, su alto contenido en celulosa y su ácido aspártico podemos decir que es ideal para aquellos que sufren de estreñimiento o de retencion de orina. Aun que podemos encontrarlos prácticamente todo el año, es ahora cuando nos hallamos en epoca de recoleccion, por ello, su precio baja bastante. Hoy prepararemos un plato que no tiene mucha dificultat y que, de buen seguro, vais a quedar bien con vuestros invitados.
Para 4 personas necesitaremos
1 manojo de espárragos verdes (si fuesen trigueros mucho mejor)
3 huevos.
Aceite de oliva
Pimienta
Sal
El único secreto de un buen revuelto es que sus ingredientes no estén muy cocidos. Como cada uno de los ingredientes tiene su tiempo de cocción, lo mejor es sofreírlos por separado. Lo primero que haremos será cortar en trocitos los espárragos, limpiar los champiñones y laminarlos. Si las gambas son congeladas, deberemos proceder a su descongelación. En una cazuela de barro con un buen chorro de aceite sofreír ligeramente los espárragos y reservar. En el mismo aceite podemos sofreír en jamón a taquitos y reservar también. Es hora de echar los champiñones. Unas cuantas vueltas y sacarlos enseguida de la cazuela. Veremos que han soltado bastante agua. Tirarla. Batir los huevos como si fuésemos a hacer una tortilla. Salpimentarlos con mucho cuidado porque el jamón ya nos va a aportar sal. Ha llegado el momento de la verdad. Agregamos un poco de aceite a la cazuela y todos los ingredientes reservados, (las gambas que estén bien escurridas). Dejamos que coja un poco de temperatura e inmediatamente echamos los huevos batidos. Remover continuamente hasta que estos cuajen. Servir con unas tostas de pan y un buen vino.
2 comentarios:
què bo!!! ara els esparrecs estàn bonissims!!!
un clásico y buen revuelto
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