Queda claro que el una de las mejores maneras de comer pulpo asado es haciéndolo a la brasa. Para ello os recomiendo las patas del pulpo de un tamaño aceptable. Pero hoy voy a presentaros una forma fácil de asar los pulpos pequeños para que os quede un aperitivo para chuparse los dedos. Se trata ni mas ni menos que prepararlos a la plancha o, para aquellos que no dispongan de una, pueden probar de asarlos en una sartén. En proceso es de lo más sencillo y nos hará falta:
Pulpitos
Aceite oliva
Pimentón rojo dulce
Sal
Perejil
Limpiar los pulpitos quitándoles boca y ojos. Hay que tener la plancha bien caliente y echar un poco de aceite sobre ella, añadir los pulpos e ir girándolo de vez en cuando para evitar que se quemen. Si su tamaño no excede de los 7 u 8 centímetros, no es necesario hacer nada. Si es algo superior, es recomendable abrirlos cortando verticalmente desde la cabeza hasta las patas, de manera que queden estas totalmente en contacto con la plancha. Mientras preparar una picada en el mortero con un poco de sal, aceite, perejil y pimentón. Una vez asado, agregarlo por encima de los pulpitos e ir buscando un buen vino tinto que tenga bastante cuerpo. Ya me contareis.