Hoy en dia, afortunadamente, podemos encontrar todo tipo de alimento en cualquier época del año, pero esto no ha sido siempre asi. Hace algunos años, especialmente en las zonas rurales, la existencia de grandes superficies comerciales, hipermercados, carnicerias o pescaderias, no era ni tan siquiera imaginable. Los pueblos, y no en todos, tenian una pequeña tienda de ultramarinos, bastante desabastecida, donde adquirir productos de primera necesidad. Si a eso le unimos el hecho de que en muchos casos, la existencia de dificultades económicas era más que evidente, comprenderemos la importancia que la tradicional matanza del cerdo tenía por nuestras tierras. Llegados los meses frios de invierno prácticamente cada familia procedia a la matanza de ese cerdo que habian estando engordando desde el mes de junio anterior siendo muy frecuente oirse los chillidos del cerdo cuando era degollado sobre la mesa de matanza y recogida su sangre para la elaboración de embutidos. Al igual que ocurre con el atun en el mar, del cerdo se aprovecha prácticamente todo, prueba de ello es la receta de hoy, con algo tan simple como las patas vamos a preparar un suculento plato.
Para 4 personas podriamos hacer
12 patones
3 cebollas
Un puñado grande de orégano
3 hojas de laurel
3 tomates maduros
1 vaso de vino tinto
½ litro de caldo de carne
Cuando vayamos a comprar las manitas, le pediremos al carnicero que nos las corte a lo largo por la mitad. Lavarlas bien y quemar los posibles pelos que puedan tener. Poner a hervir los patones en una olla con agua fria, el laurel y sal hasta que esten cocidos (en una hora aproximadamente será suficiente) e ir desespumando para limpiar impurezas. Mientras preparar una picada en otra olla, sofriendo la cebolla bien picada, los tomates pelados y triturados y el orégano. Cuando esté todo bien sofrito agregar los patones y cubrirlos con el vino tinto y el caldo de carne, rectificar de sal y dejar cocer unos 20 minutos más aproximadamente.
Para aquellos que no podais dedicarle mucho tiempo a la receta, tambien podeis usar la olla rápida (Express). En este caso poner en dicha olla los patones junto a las hojas de laurel y la sal pero sin tapar. Cuando comience a hervir, desespumar. Luego poner la tapa y cuando empiece a girar el pito de presion contar 45 minutos. Aquí si que nos hará falta un tinto con cuerpo.
Para 4 personas podriamos hacer
12 patones
3 cebollas
Un puñado grande de orégano
3 hojas de laurel
3 tomates maduros
1 vaso de vino tinto
½ litro de caldo de carne
Cuando vayamos a comprar las manitas, le pediremos al carnicero que nos las corte a lo largo por la mitad. Lavarlas bien y quemar los posibles pelos que puedan tener. Poner a hervir los patones en una olla con agua fria, el laurel y sal hasta que esten cocidos (en una hora aproximadamente será suficiente) e ir desespumando para limpiar impurezas. Mientras preparar una picada en otra olla, sofriendo la cebolla bien picada, los tomates pelados y triturados y el orégano. Cuando esté todo bien sofrito agregar los patones y cubrirlos con el vino tinto y el caldo de carne, rectificar de sal y dejar cocer unos 20 minutos más aproximadamente.
Para aquellos que no podais dedicarle mucho tiempo a la receta, tambien podeis usar la olla rápida (Express). En este caso poner en dicha olla los patones junto a las hojas de laurel y la sal pero sin tapar. Cuando comience a hervir, desespumar. Luego poner la tapa y cuando empiece a girar el pito de presion contar 45 minutos. Aquí si que nos hará falta un tinto con cuerpo.
1 comentario:
Fijate que a la picada no se me había ocurrido ponerle orégano. Tiene que estar más sabroso. Gracias por la idea.
Se ven ricas esas manitas.
Saludos
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