
Con algunos productos de la huerta, agua, hierbas aromaticas, sal y vinagre, uno puede preparar algo tan valenciano como es la salmuera (samorra). Muchos adjetivos se le han dado: acompañamiento, entrante, aperitivo etc., lo que si está claro es que, especialmente en verano, es plato que aparece en las mesas a cualquier hora del dia; en los almuerzos de la mañana, a mediodia, a la hora de la merienda e incluso en las cenas. Su preparación no tiene secreto, basta con elegir las hortalizas grandes, duras y sin golpes si vamos al mercado y para aquellos que tienen la suerte de poder disfrutar de una huerta propia, recogerla de la planta al caer el sol, ya que de lo contrario, perderá tersura. El resto ya depende del paladar de cada uno y de lo mas o menos salado o avinagrado que nos gusten las cosas.
Necesitaremos:
Pimientos verdes de carne gruesa (los italianos no valen)
Tomates gruesos verdes
Agua de pozo (la del grifo no sirve)
Sal
Vinagre
Pimientos picantes (opcional)
Hojas de limonero y/o algarrobo y/o caña
Pebrella y/o Sergioliva
Limpiar los pimientos y cortarlos en cuartos. A los tomates les haremos un corte profundo horizontalmente en su mitad. Iremos colocando en una orza de barro o de cristal, las hortalizas intercalandolas con las hojas y las hierbas aromáticas que queramos. Si hiciesemos mucha cantidad, en vez de cortar los pimientos a cuartos, podriamos poner los pimientos enteros. Entonces se les hace un corte o dos verticales en su base. En estos casos, se suelen utilizar garrafas de boca ancha para poder meter la mano. Por otro lado prepararemos la salmuera mezclando inicalmente el agua con la sal. La sabiduría popular dice que para saber el punto exacto de sal, hay que hacer la llamada prueba del huevo, que consiste en echar un huevo mediano y fresco con su cascara en el agua e ir añadiendo sal y removiendo hasta que este flote. A continuación hay que echar el vinagre. La cantidad depende, como he dicho antes, de lo avinagrado que nos gusten las cosas. A mi, la proporcion que prefiero es por cada 2 litros de agua, 125 cc de vinagre y 125 g de sal. Obviamente, cuanta más agua echemos, menos avinagrado estará. Una vez conseguida la mezcla deseada, la echaremos a la orza, cubriendo totalmente las hortalizas. Si la orza no tiene tapa, hay quien le pone un peso o hace una maraña en la su parte superior con las hierbas aromaticas para evitar que las hortalizas salgan a flote. Iremos viendo que poco a poco, tanto los pimientos como los tomates van perdiendo su color verde y van cogiendo un tono amarillento. Normalmente, la primera vez que se hacen suelen estar listos para comer en 5 ó 6 dias, luego, si vamos reponiendo a medida que vamos consumiendo, en unos 3 dias será suficiente. Si nos gusta lo picante, junto a las hortalizas se puede poner una guindilla.